El altar de Nuestra Señora de la Merced nos da noticia de los diferentes avatares que han sufrido los edificios religiosos que existían en el territorio parroquial de San Andrés y que hoy día han desaparecido. Presiden este altar tres imágenes que provienen del antiguo Convento de Nuestra Señora de la Merced, que se ubicaba a pocos metros de aquí, en la actual plazuela del mismo nombre. En el año 1835 dicho convento fue suprimido, pasando a nuestra Parroquia estas tallas provenientes de su retablo mayor, así como el altar de Santa María de Cervellón (que se ubica justo delante de donde estamos, en el ámbito del baptisterio) y la imagen de la Beata María Ana de Jesús (que hoy está en la credencia de la capilla mayor). Estas tres imágenes son de gran valor histórico y también artístico. La principal es la de Nuestra Señora de la Merced, que por sus características puede atribuirse al escultor manierista Pedro de Bolduque.
 

Flanquean a esta talla mariana las imágenes de San Pedro Nolasco (fundador de la orden mercedaria) y San Ramón Nonato (santo perteneciente a la misma), atribuidas por su elegante estilo y su enorme calidad al escultor Luis Salvador Carmona. Detrás de las tallas encontramos otro testimonio de la historia de la parroquia. Allí se encuentra un retablo de menores proporciones que procede del también desaparecido Hospital de la Cofradía de San Antonio (obra caritativa fundada por el obispo Don Juan Arias Dávila en 1494), que se ubicaba donde hoy se encuentra la sede de la Junta de Castilla y León.